Presentación a cargo de Julio Criado (Galería Alarcón Criado).
Viernes 27 Abril · Sala Casajús · 18h
PIEZA DE JUEGO.
ERICK BELTRÁN Y BERNARDO ORTÍZ:
Pieza de juego es una conferencia performativa llevada a cabo por los artistas Bernardo Ortíz y Erick Beltrán.
Dos personas entablan un juego que tiene unas reglas simples; Después de sortear quién inicia, una de ellas cuenta una historia y cede la palabra. La otra persona debe, a su vez, contestar con otra historia. Esa segunda historia tiene que tener algún vinculo con la primera. Los vínculos pueden ser analógicos, metafóricos, circunstanciales, no importa. Una vez la segunda persona termina de contar su historia, la primera persona debe contestar con otra historia. El juego se repite indefinidamente hasta que una de las dos personas decide parar. Parar puede ser una confesión de impotencia, o encontrar un momento justo.
Pieza de Juego se ha celebrado en diferentes contextos artísticos, tales como el Ephemeropteræ, Thyssen-Bornemisza Art Contemporary (TBA21) Viena, 2011, La Fundación VOLT en Bergen (Noruega) en colaboración con la Universidad de Bergen y el Wittgenstein Archives, o el MUSAC de Castilla y León, entre otros.
Bernardo Ortíz +Info
Bogotá, Colombia, 1972.
Reside y trabaja en Bogotá, Colombia.
Las investigaciones de Bernardo Ortíz se basan en ahondar sobre las distorsiones que se producen en el fenómeno representacional. Ideas como la resolución de las imágenes como mecanismo capaz de medir la densidad de la información (por ejemplo el tipo de respuesta que la imagen de baja resolución produce en una pintura suprematista de Malevich, en la que ésta queda reducida a 4096 puntos negros) , las fisuras que existen entre un determinado soporte (con preferencia por el soporte de papel, quizá por su carácter efímero) y su contenido, así como diversas estrategias de traducción de la imagen al texto y vicerversa, constituyen el nexo de sus reflexiones, que tratan de poner de relieve como los sistemas de representación chocan en la superficie de la imagen, imaginándose la pupila rozando delicadamente las cosas.
Para Bernardo Ortíz, la dimensión temporal es la que distancia al objeto del pensador, de modo de que el olvido genera una distorsión que sobrevuela en la cualidad anacrónica, atemporal de cualquier fenómeno perceptivo.
“Una página es un soporte material pero también un espacio discursivo. La frontera entre ambas cosas es bastante porosa”
Durante el 2013 ha estado presente en el 44 Salón Internacional de Artistas de Medellín, curado por Mariangela Méndez, y más recientemente en el 2014 ha formado parte de los artistas seleccionados para las bienales de Cartagena, Colombia (Curado por Berta Sichel) y Bienal de Cuenca, Ecuador, (Comisariado de Jacopo Crivelli). Su obra está representada en colecciones internacionales como el TATE Londres o el MOMA de NY.
Erick Beltrán +Info
Ciudad de México, México, 1974.
Vive y trabaja en Barcelona, España.
El trabajo de Erick Beltrán consiste en una constante investigación y reflexión acerca de los mecanismos de estructura de los sistemas de pensamiento, específicamente de la relación de poder que existe entre el proceso de edición y las construcciones de discurso. A partir de diagramas, recopilación de información, archivos, inserciones en medios de comunicación, se acerca a la manera en que se definen, se valúan, ordenan, se clasifican, seleccionan, reproducen y distribuyen imágenes para crear discursos políticos, económicos y culturales en la sociedad contemporánea, así como en la manera en que la figura de la edición define nuestro mundo y las relaciones de fuerzas entre diversos grupos de personas.
El artista reproduce y distribuye imágenes para crear discursos políticos, económicos y culturales en la sociedad contemporánea. Por medio de un proceso de producción orgánico y cambiante. Beltrán vuelca sus cuestionamientos en la creación, por un lado, de sistemas que intentan catalogar un universo determinado, y por otro, de colecciones de elementos aparentemente aleatorios unidos por factores en común. Tal es el caso de obras como la serie Calculum, que se asemeja a un gabinete de curiosidades que reúne en imagen texto y objeto piezas encontradas por Beltrán; o del libro de Nothing but the truth, resultado de la compilación de una serie de mentiras.