By PILAR VOLTES MARTÍNEZ
El seminario Por un cine sin límites. Imágenes para tiempos eléctricos, fruto de la colaboración entre el Festival de Cine Europeo y la Universidad de Sevilla, ha reunido numerosos encuentros para dialogar y reflexionar con grandes cineastas durante los días 8, 9 y 10 de noviembre en el Centro de Iniciativas Culturales (CICUS). Esta edición, que ya sería la quinta, ha estado coordinada por los profesores Sergio Cobo (US), Alberto Hermida (US) y Samuel Fernández Pichel (UPO), amantes del cine y con una amplia experiencia en el mundo audiovisual.
Los protagonistas del seminario han sido Ingrid Guardiola, Lene Berg, Pere Portabella, Eloy Enciso and Albert Serra. Por su parte, los directores Sergio Caballero and José Luis Guerín han ocupado secciones especiales en la programación, caracterizadas por una aproximación reflexiva y una conexión única con el público en las salas de cine del Centro Comercial Nervión Plaza. Esto es debido a que además de poder disfrutar de la cercanía de los directores de algunas de las películas más esperadas en presentaciones y coloquios, la inscripción incluía la entrada gratuita de hasta diez proyecciones expuestas a lo largo de la semana del 16 Festival de Sevilla, todas ellas estreno en España.
Por un cine sin límites. Imágenes para tiempos eléctricos dio comienzo el viernes 8 de noviembre y, antes de la jornada, ya se palpaba cierto nerviosismo en los participantes del seminario, sobre todo en aquellos más cinéfilos. En la presentación del seminario, el primero en tomar la palabra fue Luis Méndez, director general de Cultura y Patrimonio de la Universidad de Sevilla, que habló de la implicación del CICUS con el cine y aprovechó la ocasión para agradecer a los participantes y colaboradores su asistencia. Sergio Cobo, por su parte, hizo memoria de los cinco años que cumple el seminario, subrayando que surgió de manera colectiva y que se siente muy orgulloso del mismo. El último en intervenir en esta presentación fue Alberto Hermida, que mencionó las diferentes perspectivas del cine, la importancia de la actualidad y de la posibilidad de interacción con cineastas como Sergio Caballero y José Luis Guerín en los encuentros previstos. Además, invitó a los allí presentes a romper fronteras durante la semana.
En esta primera jornada, la protagonista fue Ingrid Guardiola, Doctora en Humanidades por la Universidad Pompeu Fabra, productora, realizadora audiovisual y directora de la película Casa de Nadie y del ensayo El ojo y la navaja, cuya intervención, basada en el hecho de reterritorializar las imágenes, estuvo dividida en tres apartados: la batalla por el territorio, una habitación (im)propia y la batalla por el rostro. Durante su charla, Guardiola incidió en cómo la tecnología moldea lo que podemos ver y no ver de los hechos, alertó de la cantidad de datos que cedemos diariamente por Internet y resaltó de la capacidad que tiene el cine de reterritorializar lo que la tecnología desterritorializa (parece un trabalenguas, pero ella consiguió transmitir la idea de forma sencilla). Para finalizar, estableció la diferencia entre los distintos “rostros” que podemos adoptar. La jornada concluyó con una ronda de preguntas, en la que se estableció una tremenda conexión entre el público y la ponente.
El sábado 9 de noviembre, el seminario contó con la presencia de Lene Berg and Pere Portabella, talentosas figuras del cine independiente europeo. Esta jornada la abrió Lene Berg, directora de cine de origen noruego, que entre visionados, habló de la función de la voz en off y su interacción con las imágenes, del uso del collage y su colisión de significados, además de las entrevistas en relación a su puesta en escena, recursos que ha empleado en películas como The Man in the Background, False Belief, Dirty Young Loose, Kopfkino, GOMP: Tales of Surveillace in Norway 1948-1989, Stalin by Picasso or Portrait of Woman with Moustache, The Weimar Conspiracy o Shaving the Baroness, algunas de ellas proyectadas en el festival. En la posterior ronda de preguntas, señaló que no se considera documentalista, ya que los documentales siempre pueden originar multitud de malentendidos y, desde su punto de vista, «todo es, de alguna forma, ficción», por lo que prefiere darle más importancia al aspecto técnico del asunto, aunque sabe que es imposible vivir sin interpretación.
Más tarde, el gran Pere Portabella (homenajeado con el Giraldillo de Honor en esta edición del SEFF), inundó de alegría la sala, luciendo una sonrisa de oreja a oreja desde el momento de su llegada. El director y productor catalán, del que en el 16 Festival de Sevilla pudieron verse las obras Vampir-Cuadecuc, El Sopar, El cochecito, Los golfos, Viridiana and El silencio antes de Bach, rápidamente captó por completo la atención de los asistentes, proponiéndoles mantenerse en el presente, reflexionar sobre lo efímero, conocer la libertad en la periferia, salir del simplismo, prestarle atención a los imprevistos y vivir con entusiasmo. Continuó regalando al público numerosas anécdotas de sus inicios en el cine, revelando una tremenda habilidad para enfrentarse a la censura existente en la época franquista y, para esquivar los obstáculos y las presiones de las instituciones oficiales. Seguidamente animó a hacer cine a todo aquel que se lo esté planteando, pero le frene el hecho de no contar con mucho presupuesto. Y también reivindicó el cine de humor.
El domingo 10 de noviembre, último día de seminario, era muy esperado por la presencia de Eloy Enciso and Albert Serra. El primero, cineasta gallego, estableció una amena conversación en la que habló de sus estudios cinematográficos, incidiendo en sus primeros pasos, cuando aún no era demasiado cinéfilo. El público pudo disfrutar de diferentes visionados de algunas de sus obras, como su primer cortometraje, realizado durante su época de estudiante en la Escuela de Cine de los Baños (Cuba), así como varias escenas de su primer largometraje, Picnic, y de su película Arraianos. Más tarde, criticó la sociedad productivista, señaló que el aburrimiento no es malo y proyectó un fragmento de su película Longa Noite, incluida en la Sección Oficial del 16 Festival de Sevilla. Durante la ronda de preguntas, destacó su reivindicación del derecho a no saber lo que uno quiere.
Tras la intervención de Enciso, llegó el turno del director y productor Albert Serra, que este año también ha participado en la Sección Oficial del SEFF con la película Liberté, la última añadida a su lista de éxitos. El catalán dio las claves para la buena adaptación cinematográfica de una novela, destacando la importancia de la inspiración del autor y el complejo proceso de construcción de los personajes, ya que en ellos recae mucha responsabilidad. Además, comentó algunos aspectos curiosos de su personalidad, como la aceptación del riesgo y del caos, la dualidad existente en su carácter (construido y artificioso, pero orgánico), la capacidad de realizar un profundo análisis crítico de las imágenes y, sobre todo, la infinita paciencia que le caracteriza. En la fase final de su charla, Serra destacó la importancia de escribir un guion o unas pautas a la hora de rodar una película, una labor que, a su juicio, requiere mucha concentración.
En definitiva, el seminario Por un cine sin límites. Imágenes para tiempos eléctricos ha sido un éxito ya que ha contado con la presencia de grandes cineastas y un público muy participativo, por lo que se ha logrado el feedback necesario en este tipo de eventos, gracias al cual, tanto los ponentes como los espectadores han podido aprender y acercarse más al maravilloso mundo del cine.