El CICUS ha recibido la mañana del jueves 2 de julio el cuadro que se encargó a Manolo Cuervo con motivo del 23 festival de Jazz de la Universidad de Sevilla. Este artista onubense, conocido por aunar el diseño y la pintura en sus obras, entra así por derecho propio en la colección de la universidad.
Desde el principio, la única condición que puso para realizar el cartel fue que lo haría como a él le gusta, pintando. Superador de los fríos diseños virtuales, Cuervo siempre fue pintor, un pintor que se expresa a través de los carteles, pero pintor.
Su obra proclama la potencia del medio; a veces sus carteles son puras utopías, pues anuncian espectáculos que no existirán o que, simplemente, no se le encargaron a él. Ellos se lo pierden, pues en cada una de sus obras va a parte de su vida y de su entorno. Cuervo, artista prolífico y cercano, nos deja en esta obra su especial relación con la música, con el jazz más concretamente, y con la universidad, que ya fueron motivos visitados por el anteriormente.
De esta forma, la universidad suma a su colección otra pieza y lo hace a sabiendas que esta obra tendrá un largo recorrido, pues en ella se suma, el jazz y la Universidad de Sevilla, ya viejos compañeros, con la cuidada visión de uno de los cuadros-carteles, del máximo representante del género.
